Monday, October 3, 2011

Oír sin acento


ABC. Sábado, 1 de octubre de 2011 

Oír sin acento
Francisco A. Marcos Marín

Artur Mas, presidente de la Generalitat de Cataluña, tiene opiniones innovadoras de interés para los lingüistas. Según su criterio, parece que hay acentos buenos y acentos malos, a los buenos se los entiende y a los malos no.  Dicho así, quizás no sea tan innovador, es una aplicación lingüística del maniqueísmo. El Sr. Mas sabe perfectamente que todos tenemos acento, la manera de hablar de cada uno lo identifica como sus huellas dactilares. El acento catalán, por ejemplo, ha servido de apoyo cómico en multitud de obras teatrales, cítese “La venganza de don Mendo”, entre otras. El español es lengua de muchos acentos, porque se expresa en muchas variantes. El catalán, aunque menos, por su menor extensión, también los tiene y el Sr. Mas lo sabe igualmente. A lo mejor es el acento lo que hace que ciertos políticos catalanes no entiendan a los jueces que han decretado los derechos de los padres a elegir la lengua de instrucción de sus hijos en Cataluña.
Para los que defendimos el bilingüismo en Cataluña a finales de los sesenta, cuando era un pelín más complicado, lo que estamos viendo es triste: no sólo se sumerge a un niño en una lengua que no es la suya, sino que además se desprecia a los menos afortunados que hablan con un acento discriminado. A la burla se suma el menosprecio, a eso no se había llegado hasta ahora. Lo que el Sr. Mas no oye bien (y quizás no quiera escuchar) es el rumor de los desarraigados. Lo oirá cuando llegue a clamor.  De todos modos, para un lingüista, lo más destacable es un descubrimiento del Sr. Mas que puede clasificarse de “zetaperil”: sabíamos que se habla con acento, lo que no sabíamos es que algunos también oyen con acento. ¡Qué cosas!

Francisco A. Marcos Marín es catedrático de Lingüística en la Universidad de Tejas San Antonio.